Hoy os vamos a hablar de los orígenes de Neobunker, cómo formamos la empresa, por qué de diseño web y diseño gráfico y no una imprenta o una empresa de preimpresión teniendo en cuenta nuestros orígenes, así como la manera en la que estamos creciendo, sin prisa pero sin pausa.
Empecemos por el principio…
Cristina Hernández y yo (Gloria) somos hermanas aunque una tenga el pelo rizado y la otra liso, a una le guste la sopa y a la otra no. Te darás cuenta cuando nos llames al estudio y no sepas distinguirnos por la voz. A día de hoy todavía le ocurre a clientes con los que llevamos años trabajando 😉
Crecimos entre astralones y fotolitos y aprendimos mucho sobre diseño gráfico y preimpresión gracias a la fotomecánica que tenían nuestros padres. Reprocolor, la empresa donde crecimos, fue donde aprendimos que la calidad y la perfección no están reñidos con la rapidez y el buen servicio. Estas directrices son las que hoy forman los cimientos de Neobunker: el servicio debe ser de calidad cueste lo que cueste.
Pero como otras empresas del sector, llegó la crisis y Reprocolor intuyó que sería una época difícil de superar, así que nuestros padres decidieron cerrar la empresa, venderlo todo y recolocar a todos los trabajadores en otras empresas de colaboradores.
¿Y qué se hace cuando has trabajado toda la vida en el mismo sitio?
Pues lo primero es buscar otras nuevas oportunidades en nuestro sector. Cristina y yo enviamos cientos de currículums a agencias de publicidad y diseño gráfico. Con la formación que teníamos en la EASD y en Barreira respectivamente, además de nuestra experiencia profesional, las empresas del sector se pelearían por nosotras.
Nadie nos llamó.
Podíamos continuar trabajando en el sector de la preimpresión e impresión tradicional, pero nosotras queríamos crear nuevos diseños, hacer cosas nuevas y adaptarnos a las nuevas tecnologías. Renovar o morir.
Una noche loca
Así fue como dos jovencitas de 23 y 27 años respectivamente, en esa incertidumbre que se olvida cuando llega el fin de semana, nos fuimos de fiesta como era habitual en nosotras. Y como las cosas pasan porque tienen que pasar (frase muy utilizada en Neobunker), nos reencontramos con un amigo que hacía mucho tiempo que no veíamos. Éste nos dijo que estaba haciendo un máster de programación web en Trebol (amigos de los que hablaremos más adelante en el Blog), así que Cristina me dijo: «Si este chico puede hacerlo, yo también”.
Después de unos meses de formación complementaria, Cristina empezó a programar páginas web.
Las primeras páginas webs de Neobunker
Las primeras páginas web que diseñamos fueron ficticias: una discoteca, un restaurante, un cerrajero… entre otras. Pero poco a poco, entre amigos y antiguos clientes de Reprocolor, sabiendo lo aplicadas y cabezonas que éramos, empezaron a confiar en nosotras y a hablar de “dos chicas que hacen webs muy chulas”. Y así fue como empezamos los primeros proyectos reales de diseño web en Neobunker.
Visitas a puerta fría
Pero poco a poco los contactos que teníamos se iban terminando, y la experiencia y rapidez en desarrollar páginas web iba aumentando. ¡Necesitábamos nuevos clientes! Así que, durante dos semanas, nos dedicamos a visitar puerta por puerta los comercios del centro de Valencia para ofrecer nuestros servicios de páginas web.
Fue una experiencia tan horrorosa, el ir puerta por puerta mendigando una oportunidad, que ambas prometimos que haríamos todo lo posible para no volver a repetir aquella experiencia, de la que solo nos salió 1 cliente 🙁
Campaña de Newsletter
Así que hicimos una campaña de Newsletter. “Tu página web desde 350€”. Sí, nosotras también tuvimos que bajarnos los pantalones. Y ahí empezaron a llegar nuevos clientes. Proyectos sencillos y mal pagados que requerían cada vez más programación.
Después, al poco tiempo, empezaron a llegar clientes más grandes.
Y poco a poco fuimos haciendo más contactos, dándonos a conocer con los proyectos que íbamos haciendo. De cada cliente que había quedado contento llegaban 3 o 4 solicitudes nuevas de presupuesto web. Y entonces Neobunker empezó a trabajar con GAES, la Asociación de Comerciantes de Ruzafa y algunas agencias de publicidad para las que hacíamos proyectos como marca blanca.
Nuestras páginas web gustaban, eran diferentes porque hasta ahora no se había dado mucha importancia al diseño en las páginas web, y los que hacían hincapié en el diseño, eran grandes agencias de publicidad que cobraban una barbaridad por una página web. Así fue como Neobunker se fue haciendo un hueco en el mercado del diseño web en Valencia.
Y entonces, encontramos al complemento perfecto
Neobunker, nuestra empresa, iba creciendo y consolidándose después de 6 años peleando por hacerse un hueco en este mundo de las páginas web. Necesitábamos desarrolladores que le echaran una mano a Cristina para que ella pudiera dedicarse a otras labores en la empresa. Así que pusimos un anuncio y después de varias entrevistas, conseguimos ampliar el equipo.
¿Y ahora qué?
Por el momento, como dice el dicho, ¡Virgencita que me quede como estoy! Pero no descartamos en 2018 hacer el equipo un poquito más grande, paso a paso y Despacito, como dice la canción de este verano.
Objetivos para el futuro
Nos enseñaron en una formación de networking, que hay que ponerse objetivos y retos. Nosotros de esto sabemos mucho, porque cada proyecto web en el que nos sumergimos tiene algo especial, o novedoso que incorporar… así que nuestro reto/objetivo más cercano es llegar como empresa al décimo aniversario ofreciendo un servicio de calidad. El día 15 de Abril de 2017 hicimos el octavo, así que todavía nos queda un poquito más de esfuerzo para conseguir llegar al décimo.
Y esto es todo lo que deberías saber de Neobunker 😉
Si tú también encontraste dificultades en tu andadura profesional, si tuviste que llamar puerta por puerta para pedir una oportunidad, si un día te encontraste en el sitio adecuado por casualidad y empezó algo nuevo… queremos que nos lo cuentes. Nos encantará leer tu opinión sobre este post y contestar a cualquier duda que te pueda surgir sobre este u otro tema.
¡Gracias por acompañarnos!